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Me está costando mucho escribir este post. A mí me gusta comentar lo positivo y aquello que ayude a las empresas a prosperar por medio de nuevas tecnologías e ideas originales; pero pienso que tengo que decir que la postal enviada mediante el servicio Correos ecard, que con tanta ilusión comenté el treinta de mayo, sí¡¡¡ el treinta de mayo, no ha llegado todavía. Lo peor es que llamé al teléfono de atención al cliente y me dicen que no saben qué ha pasado ni lo pueden saber ya que es como una postal que compras en un estanco, le pones el franqueo y la echas en un buzón; si no llega o tarda tres meses no se responsabilizan del servicio, no pueden averiguar qué ha pasado. Todo está muy bien pero resulta que yo les he comprado a ellos la postal, la imprimen ellos y la mandan ellos, por tanto deberían responder de este servicio. Total que, después de comprobar que no ha llegado, para no difamar a Correos, me he decidido a contar el resultado de la prueba. Honradamente tengo que decir que tendría que hacer más pruebas para poder afirmarlo de forma científica pero a 1,5€ me sale muy caro el experimento.
3 comentarios:
Quisiera poder decir "no me lo puedo ni creer", pero tratándose de Correos, no me parece descabellado lo que cuentas.
Por mi comentario en el anterior post solo puedo decir que me lo imaginaba...
Bueno Aurelio, pensándolo bien, si Correos no da este servicio de manera adecuada, quizá sea la oportunidad de oro para algún emprendedor, ¿no? Si Correos hubiera sido tan rápido como (dicen) que fue, ¿de qué iban a nacer las empresas de mensajería? ¿Quien no recuerda alla por los 90, aquellos mensajeros que llevaban fotolitos de la "fotomecánica" (así se llamaban, qué recuerdos) a la imprenta? En fin: Que pensandolo bien, si Correos no sabe/puede/quiere dar bien este servicio, no faltarán emprendedores que sepan, puedan y quieran ofrecer este servicio.
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